Hablar de Bojan Krkić es como destapar una botella de nostalgia futbolística. Si creciste viendo fútbol en la década de los 2000, seguramente recuerdas su irrupción en el FC Barcelona como una gran promesa en un momento muy difícil para los culés.

Era el ocaso de la era Rijkaard y la afición del Barça necesitaba un revulsivo para volver a engancharse. Y ahí llegó Bojan.

Este documental, “Bojan: Más allá de la sonrisa”, va mucho más allá del joven talento que rompió récords en todas las categorías inferiores y en el Camp Nou. Nos lleva a conocer al ser humano detrás de la eterna sonrisa, a desmenuzar su carrera y, sobre todo, sus luchas internas.

¿Por qué «Bojan: más allá de la sonrisa merece la pena?

Siempre que pensamos en futbolistas, imaginamos una vida perfecta: éxito, dinero y fama. Pero este documental desmantela esa idea al mostrarnos el lado menos glamuroso de ser una joven estrella.

Aquí, Bojan no es solo un futbolista, es una persona que lidia con la presión mediática y la ansiedad de un joven adolescente al que le cambia la vida de la noche a la mañana. Como dice su madre en el documental «un día quería ir al Corte Inglés y tuvo que volver a casa porque no pudo llegar».

El motivo principal de esta crítica es destacar cómo el documental logra lo que pocos en este género consiguen: mostrar la fragilidad de un ídolo sin sensacionalismos ni dramatismo barato.

La historia que no nos contaron

El eje principal de “Bojan: Más allá de la sonrisa” es su paso por el FC Barcelona, donde debutó a los 17 años con un peso en los hombros que no merecía en aquel momento. Se convirtió en la gran esperanza blaugrana. Y por derecho propio porque su irrupción fue espectacular.

A través de una entrevista con su psiquiatra y material de archivo, el documental nos transporta a su etapa como uno de los jóvenes más prometedores del fútbol mundial.

¿Recuerdas su primer gol? Bojan rompió el récord de Messi como el goleador más joven del club en la Champions League. Pero, mientras los focos apuntaban a su talento, pocos veían cómo la ansiedad comenzaba a eclipsar su brillantez.

Bojan no oculta nada: habla de las lesiones, de las expectativas no cumplidas y del dolor por no haber podido acudir a la Eurocopa de 2008, un torneo que España terminaría ganando. Recuperaremos partes de la historia poco agradables, acusaciones que se le hicieron a un chico de 17 años que si en du día daban vergüenza ajena, con el paso del tiempo todavía dan más asco.

Con entrevistas a Bojan, sus padres, excompañeros como Gerard Piqué, Henry o Ibrahimovic y entrenadores como Frank Rijkaard (cada vez que lo escribo tengo que mirar en google para no equivocarme), la narrativa se siente como una conversación cercana.

Creo que de las mejores intervenciones son las de Henry e Ibrahimovic, dos compañeros con los que en teoría tenía que competir el puesto, en realidad parece que fueron los que más le ayudaron.

Porque en el documental se lee entre líneas que en el vestuario no lo tuvo nada fácil. Y es normal, aunque sea un equipo al final cada uno mira por lo suyo y si viene un chaval que promete, es fácil que más de uno le haga la cama. Eso sí, no esperes nombres ni situaciones, «la ropa sucia se lava en casa».

La verdadera cara del éxito

Quizás una de las cosas que más me impactó del documental fue cómo redefine la idea de éxito. Para muchos, Bojan es una promesa “fallida” porque nunca llegó a ser el próximo Messi. Pero él nos muestra que su éxito va más allá de los títulos y los récords.

De hecho, tuvo una carrera bastante interesante, aunque truncada por una lesión en el Stoke City en su mejor momento. Pudo seguir pero creo que nunca llegó a recuperar su mejor versión, una pena.

Hay una escena especialmente conmovedora en la que Bojan explica la famosa situación en la que tuvo que hacer volver el avión que le llevaba a Inglaterra una vez se había desvinculado del Barça.

Fue tal la presión y la ansiedad que sufrió que tuvo que pedir a la tripulación que el vuelo regresara a Barcelona. Explicada por Krkic te impacta hasta que punto llegaba la ansiedad que padecía. Son cosas que no te imaginas cuando estás fuera del deporte profesional.

La escena del avión que regresa a Barcelona no solo muestra su ansiedad, sino también el vacío que a menudo sienten los deportistas cuando las luces se apagan. Ese momento me dejó con un nudo en la garganta.

¿Vale la pena verlo? ¡Por supuesto!

Si eres fanático del fútbol, este documental te hará ver el deporte desde una perspectiva completamente nueva. Y si no lo eres, no importa: la historia de Bojan es universal. Habla de cómo enfrentamos la presión, cómo lidiamos con el fracaso y cómo encontramos nuestro lugar en el mundo.

Además, es un documental corto, apenas llega a una hora y está lleno de pequeñas joyas para los nostálgicos. Desde las imágenes de archivo de Bojan como un niño entrenando en La Masía hasta los momentos más oscuros de su carrera.

Al final, “Bojan: Más allá de la sonrisa” nos enseña que el verdadero éxito no está en cumplir las expectativas ajenas, sino en aprender a vivir con las propias. ¿Qué harías tú si el peso del mundo recayera en tus hombros a los 17 años?